Presupuesto anual: principales técnicas para su elaboración - Blog Yunbit Software

La necesidad de trabajar con un presupuesto anual es algo que aún hoy no se ha interiorizado en muchas empresas españolas. Y no hablamos de pequeños negocios, sino de empresas de cierto tamaño, cuya deriva va concretándose a medida que los acontecimientos se precipitan.

Una vez que rompemos esa maldición empresarial, tenemos que decidir qué técnica de presupuestación es más conveniente para nuestro negocio.

Y no es un asunto baladí, pues no todas se adaptan a todos los negocios y es responsabilidad de los departamentos financieros saber cuál es la idónea para cada organización.

Aquí hablamos de algunos de los más relevantes:

Presupuesto Base Cero

El Presupuesto Base Cero (PBC) es la técnica que sustenta el principio de que para el próximo período el importe de cada partida es cero, es decir, nada existe y todo debe justificarse a partir de cero, analizando la relación costo – beneficio de cada actividad.

Este presupuesto está destinado principalmente a “ahorrar” ya que su novedad reside en el hecho de rediseñar el presupuesto de un año para otro de arriba abajo, eliminando todos los gastos posibles sin tomar en consideración las experiencias pasadas.

La base que justifica la utilización de este sistema es que no resulta  aceptable el uso de los gastos del año pasado como punto de referencia para los costos presupuestados este año, sólo para tener que justificar el aumento de ese gasto.

Presupuestos por programas

El presupuesto por programas se desliga de la concepción tradicional del concepto presupuestario.

Defiende la idea de que puede definirse la actividad de una negocio como una serie de programas que realiza cada una de las áreas de la empresa, de forma que la distribución de los recursos dirigida hacia las actividades provoca inevitablemente que se tengan mejores beneficios.

Este sistema presupuestario es habitualmente plurianual y distribuye los recursos en proyectos que realiza cada área y cuya suma llevará al cumplimiento de objetivos de la organización en su totalidad.

Presupuestación por objetivos

Con la idea de hacer más efectiva la descentralización y la delegación de las responsabilidades se desarrolló una nueva técnica presupuestaria que se divulgó bajo el nombre Presupuesto por Objetivo.

Tres fases se distinguen en el desarrollo de esta técnica:

1. Establecimiento de objetivos.
2. Capacitación de la organización para su logro.
3. Control del cumplimiento de los objetivos.

Como su nombre lo indica, este tipo de presupuestación concibe como premisa principal el reconocimiento de objetivos concretos que guiarán la actuación de las operaciones comerciales de la empresa.

Presupuesto por actividades

Pretende que éste se centre en las actividades, pues son estas las generadoras de costos y se estiman los recursos a utilizar teniendo en cuenta los beneficios a obtener y los factores que causan los costos de las actividades a desarrollar.

La presupuestación basada en las actividades es un método de presupuestación donde la organización estima cuantitativamente las cargas de trabajo y requerimientos de recursos que serán utilizados en la ejecución de la planificación a través del presupuesto maestro, asumiendo la presupuestación del costo de las actividades y no de los productos, al ser estas las generadoras del costo.

Es una técnica que permite asignar costos indirectos a bienes o servicios en función de las actividades que el producto o servicio consumen. De esta manera se financian actividades y no factores o elementos del coste, llegando a calcular el coste de un producto sobre la base del consumo de actividades que hace y no sobre la base de los elementos del coste o recursos básicos, los cuales son de difícil prorrateo en el caso de tratarse de costes indirectos.

Cada empresa, cada negocio y cada proyecto tienen su propia configuración y es un error aceptar un único modelo de presupuestación para todos ellos.

Así que la decisión a tomar por los responsables financieros es, eso sí, cuál de ellos utilizar, porque la necesidad de que exista un presupuesto en cualquier empresa es una idea que ya no debería estar bajo discusión en ninguna organización.