Software de gestión, personas, organización y procesos
Actualmente la tecnología es la mayor aliada para el progreso y avance de cualquier organización moderna; de ahí la importancia de realizar una buena elección de software de gestión empresarial.
Algunos de los aspectos a tener en cuenta durante la análisis y selección de software es la capacidad de los recursos humanos disponibles, el sector de actividad del negocio y los procesos que se llevarán a cabo para administrar, gestionar y automatizar de actividad de la organización.
Cuando asumimos el reto de cambiar o incluir software en la gestión del negocio debemos ser conscientes de que nada ni nadie podrá hacerlo por nosotros y que se tratará de un proceso complejo, arduo y costoso a nivel de recursos de todo tipo.
Filosofía y valores de la organización
Los objetivos de la organización y la filosofía de la misma van a determinar el socio tecnológico que seleccionemos; es decir, necesitamos socios alineados con la forma de trabajar de nuestra organización y que se adapten a las necesidades de la misma al igual que nuestra organización se adapta a nuestros clientes.
Compartir filosofía y valores facilitará mucho las relaciones profesionales y la consecución de los objetivos planteados al inicio del proceso; que sin duda podrán ir cambiando a lo largo del proceso de implementación.
Las personas, dinamizadores y precursores de la evolución
La gestión del cambio es la piedra angular para que el proyecto llegue a éxito; por eso necesitaremos el compromiso real y consensuado de la alta dirección, del equipo implicado en la dinamización del cambio; y la formación de usuarios que trabajarán a diario con la herramienta seleccionada.
La IA puede ser un recurso más; pero actualmente para que una Inteligencia Artificial pueda aprender y ayudarnos debemos de disponer de ese conocimiento previo como base para lA; por eso, las personas son la clave para la gestión del conocimiento y el cambio de cualquier tipo.
Los procesos que deberá cubrir el software
Desde luego, nada tiene sentido si el software no cubre las tareas básicas inicialmente; y permite a futuro avanzar y evolucionar con el negocio y los cambios del mercado. Es por esto, por lo que el software no debe únicamente estar adaptado al sector del negocio de la compañía, si no que debe permitir la evolución a futuro, ser adaptable y escalable.
Si tenemos en cuenta estos matices; probablemente la elección de software será más acertada.